Compite con las grandes marcas
Las grandes marcas se aproximan a los grandes eventos (de cualquier tipo) para promocionar sus servicios y productos. En estos eventos, la televisión es el más codiciado de los medios, produciéndose una auténtica subasta por estar en el momento apropiado y de la mejor manera para la marca patrocinadora.
Si hay eventos que durante el año son realmente importantes son las pruebas deportivas. Superbowl, Champions League… Y, si entre todas destaca alguna cada cuatro años, son los Juegos Olímpicos de verano, que este año se celebran en Río de Janeiro. Tal es así, que las grandes firmas incluso patrocinan durante los años anteriores a los deportistas para ayudarles a estar en la cita olímpica y, llegado el caso, estar en lo más alto del pódium y acercar su marca a los valores del deporte.
Como podrás imaginar, estas acciones de marketing de publicidad y/o patrocinio de las mejores pruebas y los mejores deportistas del mundo cuestan muchísimo dinero y sólo pueden permitírselas muy pocas empresas. Competir de tú a tú en estos medios con estas empresas es una utopía para cualquier pequeño y mediano emprendedor. Sin embargo, una de las ventajas del marketing digital es que permite recortar las distancias entre los gigantes empresariales y los pequeños emprendedores al tener costes realmente pequeños para acciones de marketing que, utilizadas inteligentemente, pueden reportar buenos resultados. Obviamente, tú y tu negocio no vais a pasar a facturar millones haciendo magia, pero sí podéis mejorar en algunos aspectos.
El 85% de los fans olímpicos están conectados a Internet mientras ven los JJOO por televisión
Mira esta imagen

El 85% de los fans olímpicos están conectados a Internet al mismo tiempo que siguen la retransmisión en televisión de sus deportes favoritos. Sí, has leído bien, ¡el 85%! Claro, estarás pensando que este mercado (el del marketing digital) al igual que el de la televisión, ya estará copado por las grandes marcas: banners, publicidad en redes sociales y motores de búsqueda… Pero hay un irreductible espacio en el que puedes competir de tú a tú: el correo electrónico.
Una de las principales ventajas del email marketing es el que es un medio de comunicación directo y muy personal. En la conquista de la bandeja de entrada de tus suscriptores no compites con nadie más que contigo mismo. Mandas el email y, si has hecho los deberes, llegas directamente al consumidor. Sin intermediarios, sin gastar más dinero. Da igual si en ese momento el evento son las campanadas de Nochevieja, la final de la Champions League o la final de los 100 metros lisos en los Juegos Olímpicos. Ahí estarás.
Descárgate ya (¡gratis!) el libro que hará crecer tu negocio sólo con tu email
- Te muestro las 5 claves que debes conocer para tener una estrategia de Email Marketing mínima viable
- Los 8 recursos infalibles para tu estrategia de Email Marketing
- Descubre qué ventajas aporta el Email Marketing a tu negocio que no aportan otras estrategias de Marketing Digital
"*" señala los campos obligatorios
¿Es esto importante? Vuelve a mirar el gráfico anterior. El 30% de los espectadores que están delante del televisor siguiendo los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro están consultando al mismo tiempo su correo electrónico. Eso es el el 30% de muuuucha gente (las audiencias televisivas de los Juegos Olímpicos son millonarias en muchas de sus pruebas). Además, fíjate que el 27% están conectados a Internet en ese momento con intención de comprar algo. ¿Te lo quieres perder?
¿Qué puedes hacer para aprovechar las buenas audiencias de los grandes eventos televisivos?
Pero, como ya te he comentado, no todo es dar al botón de enviar y listo. Además de las buenas prácticas para que tu correo acabe en la bandeja de entrada de tus suscriptores, debes tener en cuenta lo siguiente:
- Infórmate de cuáles son las pruebas que más audiencia tienen. A priori parece que los eventos con mayor audiencia son los más atractivos (y así es), pero valora también qué deportes son más afines a tu imagen como marca y aprovéchalo.
- Procura que el contenido de tu correo sea relevante en ese momento. Aprovecha la oportunidad que te brinda el evento para personalizar en este sentido el contenido y sobre todo el asunto de tus correos.
- Piensa más que nunca en que tus correos se puedan leer. El 62% de los fans olímpicos que están frente al televisor y conectados a Internet al mismo tiempo lo hacen a través de dispositivos móviles. Tus emails deben leerse también en estos dispositivos.
- Prevé un incremento de tus necesidades logísticas o de tiempo disponible en caso de vender productos físicos o servicios. Si lo que vendes no es escalable, tienes que prever que tu carga de trabajo y necesidades logísticas se incrementarán en los momentos posteriores a la acción de marketing. No defraudes a tus clientes y procura estar a la altura de las circunstancias.
Todo esto que te cuento es válido para cualquier gran evento televisivo. Por eso es importante que planifiques con tiempo tu estrategia de email marketing y los emails que vas a enviar. Esta planificación tiene que tener en cuenta estos grandes eventos y cualquier otro que pueda estar relacionado o pueda ser de interés para tu negocio (periodos de rebajas, épocas de regalos, etc.).
¿Quieres conocer con exactitud el beneficio para tu propio negocio de tus campañas de Email Marketing?
- Descubre cómo saber los márgenes a los que tienes que trabajar para obtener beneficios
- Averigua cuánto tiene que gastarse cada uno de tus clientes para ser rentable
- Analiza cuál es el coste de cada uno de tus clientes. ¿Ya sabes cuánto te cuesta exactamente realizar una venta?
- Mejora el rendimiento de tus campañas de Email Marketing gracias a mi Calculadora ROI
"*" señala los campos obligatorios
La televisión puede ser tu aliado
Más allá de los grandes eventos, la televisión es siempre una gran oportunidad para optimizar tu estrategia de email marketing. No hagas caso de los falsos profetas que quieren jubilar a este medio del primer puesto de preferencias entre los usuarios. La televisión es el medio más consumido y cada vez lo es más. Además, cada vez se adapta mejor a los usos y costumbres de los nuevos usuarios, pasando de ser un medio 1.0 a estar perfectamente integrado en un modelo de consumo que es a la carta.
Por todo esto, debes aprovechar las sinergias que este medio te ofrece para tu estrategia de email marketing. En primer lugar, analiza bien los horarios de apertura de tus emails y compáralos con los horarios de más audiencia de la semana (no es difícil conseguir esta información, ya que existen multitud de webs que informan a diario sobre este asunto). Esto te dará la clave sobre cuándo es buena hora para mandar tus correos y personalizarlo en función de los contenidos televisivos que se emiten en ese periodo de tiempo concreto. Ten en cuenta también el público al que te puedes dirigir, cada franja horaria televisiva tiene una audiencia mayoritaria. Obviamente, esto no es garantía de éxito, pero sí que nos permitirá establecer KPIs que nos indiquen si la estrategia es correcta. Por ejemplo, si los correos se abren fuera del horario que era nuestro objetivo, quiere decir que tu audiencia no está frente al televisor en ese momento. Si, por el contrario, las tasas de apertura son altas y coinciden con el horario, así como las tasas de clics, podrás afirmar que tu estrategia es correcta y estarás aprovechando las sinergias que te ofrece este medio. Ya sabes que en marketing digital medir tiene una importancia capital, ya que nos permite saber si vamos por el buen camino y rectificar el rumbo en caso de ser necesario. No tengas miedo a experimentar.
En esta estrategia conjunta televisión/email marketing, tienes que seguir teniendo mucho cuidado con que tus emails se abran en cualquier dispositivo. No subestimes que un 80% de la audiencia está utilizando dispositivos móviles (principalmente móviles) mientras están frente al televisor.
Ten en cuenta que si tu negocio es B2B (Business to Business), lo más probable es que esto no sea de aplicación para ti, ya que habitualmente los horarios de apertura de tu correo coincidirán con el horario comercial o laboral.